La Fiscalía General del Estado de Quintana Roo ejerció acción penal contra los cuatro policías de Tulum que sometieron a una mujer con uso excesivo de la fuerza, maniobra que le provocó la muerte.

El fiscal Óscar Montes de Oca informó que la necropsia realizada a la víctima arrojó que murió víctima de una fractura en la parte superior de la columna vertebral, producida por la ruptura de la primera y segunda vértebra.

Los dictámenes en materia de criminalística y medicina forense determinaron que las lesiones se debieron a las maniobras de sometimiento que se aplicaron a la mujer durante su detención.

“La técnica policial de control corporal aplicada y el nivel de fuerza utilizado, se realizó de manera desproporcionada, inmoderada y con un alto riesgo para la vida, ya que no fue acorde con la resistencia de la víctima lo que ocasionó una desaceleración con rotación del cuello, violándose con ello lo establecido en la Ley Nacional sobre el uso de la fuerza”, sentenció el fiscal en conferencia de prensa.

Tras conocer el parte del Servicio Médico Forense de la FGE, el Ministerio Público ejerció acción penal contra los cuatro policías municipales de Tulum, entre ellos una mujer.

Los uniformados, quienes ya fueron separados del cargo, serán acusados por feminicidio y en próximas horas serán ingresados al centro de detención correspondiente, donde quedarán a disposición de un juez de Control.

El fiscal Montes de Oca añadió que contrario a versiones periodísticas, hasta el momento la víctima no ha sido identificada oficialmente, por lo que se sigue recabando información para conocer su identidad.

Videos difundidos en redes sociales muestran el momento en que una mujer fue sometida contra el piso en calles de Tulum, la tarde del sábado, supuestamente por alterar el orden público.

Una oficial colocó su rodilla sobre la espalda de la víctima para esposarla. Minutos después la mujer perdió el conocimiento y fue subida inconsciente a la batea de una patrulla. Posteriormente se supo que murió.

Activistas identificaron a la víctima como Victoria Esperanza Salazar, de 36 años de edad, y originaria de El Salvador.